Alumbrado por la tenue luz de tu recuerdo,
voy sembrando girasoles por las aceras
para que al verlas tornarse sepa que has vuelto.
Arropado por tu susurro de carbonera
voy ardiendo como puñados de rastrojo seco
me haces humo y yo te invado como la niebla.
Mecido por la corriente de tu cabello
me hago el muerto y me dejo arrastrar a tu vera
para que vuelvas a resucitarme con un beso.
Gallardo subiré un día más hasta tu reja,
a pedirte que me regales lo que más quiero:
verte vestida solo por la luz de la primavera.
Ufff... es impresionante
ResponderEliminarMuy buena. Me ha gustado
ResponderEliminarQue bonito !!!
ResponderEliminarQue bonito !!!
ResponderEliminarGracias a los tres, así da gusto continuar
ResponderEliminarq bonito q bien escribes! no lo dejes nunca
ResponderEliminarMuchas gracias, espero no tener que abandonar esta afición nunca. Un saludo.
Eliminar:)
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