Recopilación de textos narrativos y poesías personales, disfrutad su lectura igual que disfruto yo llevando mis dedos desde su inicio hasta su punto y final.

sábado, 12 de marzo de 2016

De artesanía

Hemos regresado al mundo de los artesanos:
Cuando entras en las redes sociales, o simplemente das un paseo por la calle, con frecuencia puedes reparar en un detalle que a menudo pasamos por alto, y es que nos hemos convertido en artesanos, ¡artesanos de nosotros mismos!. Las personas hoy día pasan horas en su hogar "esculpiendo" un aspecto que no es el suyo, dedican un tiempo más que considerable a transformarse en algo que por definición es una imagen genérica y estandard de lo que consideran "Belleza"... Unas veces por medios autodidactas escogiendo un patrón al que seguir, y otras por mediación de profesionales de la estética, pero siempre buscando lo mismo, adaptar su rostro y su aspecto a lo que consideran hermoso y bello, dejando a un lado la singularidad y muy a menudo sin ser conscientes.

Ocultar lunares que aparecen en su piel de manera única e irrepetible; disimular una mueca que nos recordaba de quién somos hijos; agrandar sus ojos, algo que en otra época hubiera sido el espejo del alma y hoy pierde toda expresión romántica porque no es una mirada real lo que contemplas, no son unos ojos únicos e irrepetibles sino aquellos que deseamos mostrar, aquello que queremos hacer creer que está ahí... Y sin embargo al despertarnos por la mañana esa mascarada no está, al menos no hasta que no terminemos nuestra labor de artesanía frente al espejo. 

Nos quieren hacer creer que la belleza es tan artificial y prefabricada como un vehículo que sale de una gran nave a través de una cadena de montaje donde miles de réplicas salen a la calle. Siento tener que discrepar, aunque esto sea solo una opinión personal, pero considero que la belleza está en la naturaleza, en lo auténtico, en hallar lo más puro y hermoso de alguien o algo sin deformarlo, sin empujarlo en un molde genérico y esperar a que se amolde como pequeños pies de niñas asiáticas.

Pero cada día importa menos, nos basta con que aplaudan la imagen que mostramos, aunque nosotros mismos sepamos que no es real, que cuando nos vean tras el filtro puede que ni siquiera nos reconozcan... hemos perdido nuestro amor propio, como si no estuvieramos orgullosos de nosotros mismos...

Vivimos en los años de la artesanía, todos aprenden a "crear" algo que no es otra cosa que una copia de otra copia, no tardará en llegar el día en que los niños nazcan y no salgan del paritorio hasta que pasen por retoque... Y a quien se atreva a ser uno mismo, a ese lo mirarán con desprecio, dirán que le falta vergüenza para no embutirse en el molde y, por supuesto, que jamás estará a la altura del hermoso ejército de maniquíes.

 

3 comentarios:

  1. Buena feflexión este género siempre me gustó y a tu tienes cosas que decir porque piensas y buen estilo para contarlas. Me sirve este articulo. Me encanta hacer pensar. Como tú lo haces aquí con tus lectores.

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  2. Leyendo lo que escribes se percibe que no sólo eres un gran artista, sino también una persona de una calidad excelente. Sigue siendo tú y contribuyendo a hacer el mundo mejor con tus pensamientos y tu personal forma de expresarlos. Gracias por este ratito de lectura, breve pero como siempre...intenso.

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  3. Gracias a los dos, sin duda es vuestro ánimo el que me impulsa a continuar escribiendo y compartiendo mis sentimientos y mis ideas, no hay mayor motivación que la esperanza, saber que hay personas como vosotros en el mundo.

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