Recopilación de textos narrativos y poesías personales, disfrutad su lectura igual que disfruto yo llevando mis dedos desde su inicio hasta su punto y final.

domingo, 30 de octubre de 2016

de mil dolores


Sentí un dolor inmenso, como si todas las ventanas de mi alma se hicieran añicos, sentí crujir las vigas de mis creencias y cómo toda la realidad se desvanecía como un trozo de papel sobre una pila de brasas al rojo... y más allá,  al otro lado del umbral... tus ojos.

Me mirabas como un turista extraviado miraría el techo si entrase por accidente en la capilla sixtina, y yo, incrédulo, contemplaba tu sonrisa, como no se puede mirar otra cosa (pues nada hay tan hermoso en este mundo) y me preguntaba... ¿por qué? Tanta suerte, tanta magia, tanta luz brotando de tus pupilas...

Sentí un dolor inmenso, el dolor más placentero que jamás podría sentir,  mi mundo se hizo trizas y tu levantaste jardines, palacios y bosques de muérdago donde perdernos a propósito. Sentí como si enderezasen todos mis huesos quebrados, y allí, a mi lado, curabas con tus besos cada esquina de mi cuerpo...

A veces la vida duele, y nos hace mal, otras sencillamente nos salva... Yo miro los arcones de mi memoria y descubro que me duele cada instante en que ella no estaba aquí, aún cuando no la conocía, porque mi alma ya sabía que la necesitaba... Y me duele cada te quiero que se traba en mis labios y no alcanza sus oídos, me duele el corazón si no siento sus latidos...

Hiciste trizas mi mundo, solo para hacerme ver que vivía en un desierto, pusiste patas arriba mi madriguera, solo para hacerme ver que mi vida no tenia sentido... sin ti.

Gracias.

Pablo León Alcaide

lunes, 24 de octubre de 2016

De rendir cuarteles

En cada uno de mis suspiros se ha rubricado tu nombre, tus manos, sobre mi piel, redactando la rendición de todos mis sentidos, y en cada bastión de este condado de huesos y cuero,  alzan el vuelo bandadas de gorriones entonando cantares de gesta por cada uno de tus dedos.
En cada una de mis melladas lanzas se enredan tus cabellos, tu rostro, frente al mío, levantando empalizadas en todos los francos de nuestro nido, y en cada esquina de este reino de metro y medio izamos banderas con los jirones de historias pasadas.
Porque tu, solo tu, me haces sentir vencedor cuando me rindo a tu sonrisa, me haces sentir valiente cuando temo perderte...
...Me haces sentir vivo por haber estado muriendo en todo lo que he vivido hasta encontrarte.

Pablo León Alcaide

lunes, 17 de octubre de 2016

de bilidades de la carne

De entre mis atropellados pensamientos, los cuales a la vista está que no respetan apenas un respiro para poder escribir un puñado de líneas, se escapa una idea que ya rondaba por aquí desde hace un tiempo...
¿Por qué los hombres odian a las mujeres? ¿Por qué emergen y se solidifican religiones que ven al sexo femenino como la causa de todos los males?

Por miedo, digo yo, por sentirse vulnerables aún bajo todo el manto de arrogancia y prepotencia que identifica a los "inocentes". Si la mujer es el germen de los pecados del hombre.. ¿No será que facilmente se dejan convencer? ¿ No será que queremos pecar con esa mujer? Dejemos claro una cosa, una mujer que triunfa entre los hombres no es una "puta", y un hombre que haga lo propio no es un conquistador, corremos a insultar a todo aquello que nos atemoriza, nos volvemos violentos ante lo que nos amenaza... ¿Qué ha hecho la mujer? No me considero en absoluto feminista, y mucho menos hembrista, pero se que mi madre me cargó dentro de ella durante 9 meses, y que después se desgarro  para traerme al mundo... y doy gracias de que unos años antes sedujera a mi padre... Le debo la vida, igual que hoy se la debo también a la mujer que me acompaña en mi día a día y que hace de mi mundo algo estupendo...
Tienen influencia sobre nosotros, es algo innegable, pero ¿Por qué temerlo? ¿Tan débiles nos sentimos que asumimos que harán todo lo que quieran con nosotros? ¿Tan malas son por recordarnos nuestra naturaleza?
Nacidas de la costilla de Adan..  ¿Por qué tanta sumisión? Hombres que se alejan voluntariamente del cariño de una mujer vienen a decirnos que son el mal, predican con su ejemplo que no pueden obtener una posición siquiera igualitaria a la del hombre... Pero todos hemos salido de una mujer, todos le debemos la vida a alguna... sólo por eso ya se merecen el mejor de los tronos...

La sociedad es un organismo que se automutila, mastica cristales olvidando el dolor de vientre la noche pasada..

Pablo León Alcaide

miércoles, 12 de octubre de 2016

De partirse el alma

Me visto despacio, que la prisa ya me sigue el paso,
Abrocho esta camisa que ya lleva demasiados ojales,
Demasiadas ventanas para que entren vendavales,
Me miro al espejo, demasiada barba pero para el caso
Mejor que pinche, que le den a los buenos modales.
En estos días agrestes que no conocen el descanso
Siembro mi piel de espino y puñados de pedregales,
Las aficiones parecen disfrazarse de mero retraso
Y las palabras cada vez más vacías y funcionales.
Todos tienen a la diestra su propia vara de avellano,
pero nadie allana su vereda, nadie endereza sus calles...
Amanece y sigo entero, enteramente hecho de rotos,
Me pregunto cada mañana si la próxima aguja
Vendrá a coser mis retales o a perforarme otro poco.
Apuro el reloj hasta que no me permita más caladas,
Derramo otra línea cargada de mi, repleta de todo
Antes de volver a correr cortinas y abrir ventanas,
De ponerme de cara a las inclemencias partirnos el alma..


Pablo León Alcaide